Son unos bollitos muy fáciles de hacer. Tienen un toque dulce que me encanta para mezclar con salado o con más dulce. Mis preferidos son de jamón con tomate.
También les puedes añadir unas pepitas de chocolate a la masa.
También les puedes añadir unas pepitas de chocolate a la masa.
Ingredientes:
- 3 tazas (390gr ) de harina
- 1 taza (240ml) de leche templada
- 6 cucharadas ( 42gr) de miel
- 1 pizca de sal
- 5gr de levadura de panadero
- huevo batido para pintarlos
Preparación:
En un vaso mezcla un poco de la leche con la levadura hasta que se disuelva.
En un recipiente amplio pon la harina y la sal. Haz un hueco en el centro y echa el resto de ingredientes (excepto el huevo). Mezcla bien hasta que tengas una masa que puedas trabajar en la encimera.
Amasa un poco en la encimera. Debe ser una masa homogénea y suave.
Pon en un cuenco limpio y tápalo con un trapo de cocina o un gorro de ducha (que solo uses para este fin :P) y deja reposar una hora y media o dos.
Pasado el tiempo le das forma a los bollitos (salen unos doce de tamaño pequeño), los pintas con huevo y los dejas reposar otra hora y algo o dos horas.
Los horneas unos ocho o diez minutos a 180º. Cuando estén listos los sacas del horno y los dejas enfriar en una rejilla.
A mi me gusta la versión de panecillos pero puedes hacer un pan grande en un molde alargado, como si fuese pan de molde. Si lo haces así tendrás que hornear unos 30-35 minutos.
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